Friday, April 21, 2006

Potosi

Despues de Uyuni, y el tour que hice por el selar, sali hacia Potosi, antes de llegar a Sucre, una ciudad que merece mas que el mediocre parrafo que puse ultimo acerca de la ciudad.
Potosi es la ciudad mas alta del mundo a 4,070 metros sobre el nivel del mar, en el bus que me llevaba a Potosi, conoci al bajar a dos hermanos Ingleses. Decidimos entonces acompañarnos y buscar alojamiento juntos. Tuvieron la idea de ir a un hotel que estaba recomendado en su libro de turismo. Yo mas bien encontre caminando otro donde el precio que ibamos a pagar seria el que pagariamos cada uno en el hotel que ellos querian ir. No fue muy dificil convencerlos para irnos los tres a este ultimo. Asi que compartimos entonces el cuarto con 4 camas, y muchas experiencias que nos harian creo buenos amigos. Fuimos a las minas de Potosi. Esta mina data de los inicios de la colonia, cuando los españoles llevanban a los indios a trabajar a esta mina para extraer plata y mandarla a España. 1573 me parece que es la fecha donde todo esto empieza. Nuestro guia hacia la mina tambien nos hizo, a los ingleses a mi y al resto del grupo que estaba pagando para ir a las minas, comprar hoja de coca, dinamita, cigarros, sodas y agua. Gracias por su colaboracion nos decia mientra nos señalaba a la sra que nos estaba vendiendo los productos estos. En otras palabras fue una colaboracion obligada. En fin, todo por el bienestar del minero. Dentro era frio por partes y caliente por otras. Los mineros estaban unicamente equipados con casco-linterna y una mascara para el polvo. Una mascara de papel, como las que usan en los hospitales. Definitavemente algo dificil de ver cuando uno piensa que estas personas estan alli por ocho horas. Nuestro guia se convirtio algo politico cuando comentaba acerca del maltrato de los paises grandes hacia Bolivia pero estuvimos mas preocupados cuando nos hizo bajar a quince metros para ver y escuchar el taladreo de una nueva veta. Algo peligroso. Al salir, nuestro guia hizo detonar un pár de petardos de dinamita como si fueran juegos artficiales de año nuevo. Todo se estremecio, pero no tanto como cuando estabamos adentro de la mina y hubieron seis explosiones afuera. Algo tambien que no estabamos preparados y que desconociamos de alguna posible consecuencia.Al salir de la mina y despues de darme varios cabezazos contra algunas partes de techos bajos, los cuales agravaron en algo el golpazo que me habia dado el dia anterior en Uyuni contra un letrero que decia "Internet", nos dirigimos a almorzar. Obviamente queriamos tambien un lugar tradicional con comida boliviana y con gente boliviana. Se nos juntaron tambien un americano y un venezolano. Todos pedimos "Pique Macho" que nos nada mas que papas fritas con pedazos de carne y salchichs fritas encima de las papas y con un poco de tomate. Hmmm. Lo comen mucho en Potosi pero no le veia lo original. Le pedi a la sra porfavor que en vez de las papas me de arroz. Nunca fui tan atraido por las papas fritas la verdad. Pero esta falta de "bolivianes" en mi paladar fue excelentemente substituida por un individuo que estas horas de la tarde y un martes, de eso si me acuerdo, estaba en un estado alcoholico enviadiable para algunos. Un amigo de el, lo acomadaba a cada rato contra la pared para que no se caiga, y el abria los ojos como si recien hubieran prendido la luz y le hacia señas, con el dedo indice, al amigo para que le traiga una cerveza mas....o quiza le decia que se espere un momento.
Luego fuimos al museo de la moneda. Un museo muy bien organizado, y con mucha historia. Vimos y aprendimos desde las primeras monedas que se acuñaron en Potosi, unas de forma casi redonda pero exactamente. Nos explicaron que las monedas no eran del todo de plata, pero que estaban mezcladas con zinc y niquel para que sean mas resistentes. Vimos como evoluciona la moneda con el tiempo, y como es que los españoles hicieron traer todo una maquina entre barcos, mulas y espaldas de indios hacia Potosi. Las primeras monedas empiezan a acuñarse hacia los 1,700 y tuvieron algunos trabajos de artesanias donde uno podia grabar su nombre en 1,978. Fue interesante tambien aprender que aunque hubieron tambien esclavos negros en Peru, estos no resistian mucho trabajar en lugares altas como Potosi por eso es que se descarta que los esclavos negros eran usados como empujadores de las poleas para la acuñacion de las monedas. Mas bien eran delincuentes españoles que eran traidos de España pára hacer estos trabajos. Debo recalcar que vi, en La Paz, una chola-negra. Un mujer vistiendo las clasicas polleras de colores, pero ella era una mujer morena.

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